Rebeca Marín
La aprobación del paquete económico 2023 para la Ciudad de México en parte se destrabó y no tuvo mayor discusión, luego de que los propios diputados lograron que no prosperara en grandes dimensiones el recorte presupuestal para el Congreso capitalino que propuso el gobierno local, al lograr para ese órgano deliberativo mil 650 millones, 150 millones más de lo programado, con cargo al pago de emisiones de certificados bursátiles, acordado con la propia Secretaría de Administración y Finanzas (SAF).
El aumento obtenido para el presupuesto del Poder Legislativo local de 150 millones de pesos, salió de una reorientación del dinero por parte de la SAF y de acuerdo a la propia dependencia, no corresponde a la deuda al utilizarse recursos fiscales para inversión. Sin embargo, finalmente los representantes populares no lograron presupuestarse los más de mil 766 millones de pesos que proponían, con base al programa operativo anual que presentaron.
Al fundamentar el dictamen del Presupuesto de Egresos 2023 que se presentó al pleno, la presidenta de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, Valentina Valia Batres Guadarrama, explicó la asignación de mil 650 millones para el órgano deliberativo, que son resultado de la solicitud de legisladores integrantes de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), con cargo al pago de emisiones de certificados bursátiles.
Resulta que tras las negociaciones el Congreso de la Ciudad de México sí tuvo aumento, en tanto que se castigó a casi todos los órganos autónomos. El Legislativo autorizó, tras pláticas con propios funcionarios de la SAF, superar su techo de mil 500 millones de pesos propuesto por el gobierno para tener un presupuesto para el próximo año de mil 650 millones de pesos, que le permitirán hacer frente a diversos gastos, como el enfrentar demandas laborales.
Previo a la aprobación del Presupuesto de Egresos, la coordinadora de la fracción parlamentaria de Morena en el Congreso capitalino, Martha Soledad Ávila Ventura, explicó que los recursos adicionales que se obtuvieron para el recinto de Donceles y Allende, en parte servirán para los 17 laudos que se tienen con la utilización aproximada de 25 millones.
Además el Poder Legislativo local tiene programado para el próximo año el mantenimiento de sus inmuebles, principalmente el de Donceles, donde se llevan a cabo las sesiones del pleno, ante los dictámenes que en ese sentido emitió en su momento la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, para lo cual se calculan al menos diez millones de pesos.
Con los recursos obtenidos, el Congreso enfrentará el incremento salarial autorizado para los trabajadores de base.
El vicecoordinador de la fracción parlamentaria del PAN en el recinto legislativo, Federico Döring Casar, propuso que los diputados integrantes de la JUCOPO tengan una reunión a principios de año con el Oficial Mayor y el responsable de la tesorería interna, para que se conozca a fondo lo que se hará con el presupuesto de mil 650 millones.
A la SAF, en su momento el Congreso entregó su programa operativo anual con detalle de recursos a requerir, más de mil 766 millones de pesos, pero se le estableció un techo presupuestal de mil 500. Ya con los 150 millones se lograron los mil 650 y le faltaron alrededor de 116 millones con relación a lo que se pidió en una primera instancia.
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