Martín Aguilar
El alcalde de Miguel Hidalgo, Mauricio Tabe Echartea, arremetió contra el gobierno capitalino al acudir al Congreso de la Ciudad de México a rendir cuentas, en un ejercicio que no se llevó a cabo conforme a lo establecido, debido a que tras hacer uso de la palabra por poco más de 30 minutos, en los que se refirió al asedio por parte de las autoridades, se retiró del Salón Heberto Castillo del órgano deliberativo, sin dejar que se procediera a los cuestionamientos programados de los diputados.
La comparecencia del titular de la demarcación territorial programada a las 12:30 horas y que arrancó a las 13:04 del viernes, hasta que terminó el alcalde de Magdalena Contreras, Luis Gerardo Quijano Morales, quedó inconclusa y por la manera en que se condujo se quejaron legisladores morenistas, mientras que la presidenta de la Comisión de Alcaldías y Límites Territoriales, la priísta María de Lourdes González Hernández, se comprometió a proceder conforme a lo conducente.
Tras decir a los legisladores que por escrito les dejaba un informe detallado y despedirse, Tabe Ehcartea se levantó de la silla que le dispusieron y, por no haber condiciones se determinó dejar inconclusa la comparecencia a las 13:48 horas, sin embargo, se dio tiempo para que legisladores hicieran uso de la palabra, como fue el caso del presidente de la Comisión de Administración Pública Local, el morenista Gerardo Villanueva Albarrán, quien de entrada, en relación a la actitud del alcalde, expresó: "nomás faltó que nos sacara el cuchillo, es una cobardía lo que está haciendo".
Ya sin la presencia del responsable de la demarcación territorial, quien agradeció el apoyo de los panistas, en especial del coordinador de la bancada del PAN en el recinto de Donceles y Allende, Federico Döring Casar, el diputado de Morena en su calidad de secretario de la comparecencia se quejó y al dirigirse a la del PRI, Lourdes González, declaró que "ha sido la comparecencia más grosera, esperamos colocar en el formato que vengan serenos los alcaldes y cualquier funcionario; no nos merecemos este trato majadero".
Es que Tabe, quien afuera del recinto de Donceles y Allende fue recibido por un grupo de colonos y organizaciones de la demarcación, durante su estancia aclaró que "no vengo a complacerlos" y se refirió tanto al asedio por parte del gobierno citadino que "no dejan de fregar a nuestros vecinos", como al castigo presupuestal hacia la Miguel Hidalgo.
Aseguró que él, junto con otros responsables de alcaldías, es víctima de persecución y asedio, así como de un mal trato por parte de la administración capitalina, cuando la demarcación territorial a su cargo capta el 20 por ciento del predial, pero de ese impuesto solo le otorgan el 3 por ciento, "con el pretexto de que los recursos son para los ricos", lo que aseguró no es así, sino para trabajar en las zonas más marginadas.
En el poco tiempo que estuvo en el Salón Heberto Castillo, nombre del personaje de izquierda que comentó que si viviera lamentaría la mala conducción de una administración que se describe demócrata, el alcalde refrendó que "el asedio del gobierno ha implicado limitar la facultad de las alcaldías en varias materias; están traicionando por lo que luchaban, llegan al poder y se olvidan de los derechos, los cancelan".
Flanqueado por la militante del PRI González Hernández y por el de Morena Villanueva Albarrán, el servidor público, desde que comenzó a hacer uso de la palabra, se mostró contundente en quejarse por el proceder del gobierno en su contra, así como de otros personajes que en la actualidad forman parte de la oposición en la metrópoli.
Insistente aludió el asedio y, además, la persecución por parte de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina, con un gobierno a cargo de Claudia Sheinbaum Pardo que se distrae de su labor con perjuicio hacia los habitantes, situación que comentó "a nosotros nos entretiene" pero daña a los vecinos.
La postura de Mauricio Tabe es que, en Miguel Hidalgo, "hemos entregado resultados para los que más necesitan", con la recuperación de 17 módulos de vigilancia y una reducción de la incidencia delictiva superior al 19 por ciento, con todo y que "se han roto las formas de la discusión política y ahora se actúa con la persecución y sin pruebas".
Entre los se quejaron por el proceder del alcalde, está la congresista de Morena Valentina Batres Guadarrama, quien aclaró que la Ley Orgánica de Alcaldías mandata la comparecencia de sus titulares y Tabe Echartea no cumplió con ello, por lo que demandó se proceda en contra de él al no someterse al formato.
Consideró que "es grave que se siente el precedente a la burla que hace el alcalde a la institución; se viene a burlar del Congreso, lo que vino a señalar fue una serie de conjeturas personales que se las puede guardar".
La morenista refrendó que se trató de un acto que violó la ley y se debe tomar en consideración que Mauricio Tabe no compareció, porque no rindió cuentas y es una tomadura de pelo al Legislativo su proceder.
El vicecoordinador de la asociación parlamentaria Alianza Verde Juntos por la Ciudad, José Martín Padilla Sánchez, externó la molestia colectiva por lo sucedido durante la presencia del responsable de Miguel Hidalgo. "Vino a un muro de lamentos y quejarse y no a dar cuentas de lo que realiza; aquí tenemos datos de su mal gobierno y las gestiones que hace", remató.
A su vez, enojada, la diputada de Morena, Nancy Núñez, expuso que los congresistas tienen derecho a expresar sus puntos de vista y es lamentable que no los haya querido escuchar el de la demarcación, que probablemente se retiró porque no tenía nada que informar, a la vez que expuso que seguramente se le aplicará la revocación de mandato.
Dentro de su presentación inicial, Mauricio Tabe Echartea declaró que los de Morena y la administración local hoy defienden lo indefendible; abandonaron las causas de las mujeres a las que se les reprime, "por eso los movimientos feministas los repudian".
Señaló que "aquellos líderes de izquierda que luchaban por la democratización del país, ahora quieren imponer un viejo régimen" y, delineó que los vecinos no quieren autoritarismo y "les dicen ya basta con acabar con las instituciones", con la agenda de derechos humanos, de asediar a la oposición, de ahí que la gente esté arrepentida de haber votado por los que gobiernan, más cuando se abandonaron las causas.
Para el alcalde hay un abuso del poder por parte del gobierno, con un castigo a las alcaldías que provienen de la oposición. "No se preocupen por nosotros, preocúpense por la gente que está arrepentida y se ha cansado de ustedes", asentó al referirse a los del partido en el poder.
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