Falta menos de un mes para las elecciones del 4 de junio en el Estado de México y Coahuila.
En la segunda entidad está prácticamente definida la contienda en favor del candidato de la Alianza Va Por México.
Mientras que, en el Estado de México, la competencia adquiere derroteros dignos de analizar en sus diferentes vertientes.
La candidata de la Morena y aliados, Delfina Gómez, es quien carga con la mayor cantidad de negativos, en comparación de Alejandra del Moral.
Es evidente que la maquinaria de Morena y del gobierno de la 4T, harán todo lo posible para que su candidata logre la victoria.
Sin embargo, sus operadores han sido incapaces de quitarle la etiqueta de "delincuente electoral", según la determinación del Tribunal electoral.
Mucho menos le han ayudado a superar sus limitaciones de oratoria y manejo discursivo creíble en temas como el combate a la corrupción.
La candidata Gómez Álvarez, arrastra haberle quitado 10% de su salario a los trabajadores del ayuntamiento de Texcoco.
En 2017, Alfredo del Mazo, quien inició la campaña con una desventaja de 10 puntos, la venció con 33.56% de la votación contra 30.78% de Morena.
Aquella ocasión contó con el activo Andrés Manuel López Obrador, con el vertiginoso ascenso que logró en la elección de 2018.
Durante las elecciones de 2021, Morena y aliados fueron barridos tanto en las alcaldías como en el Congreso de la entidad.
Para esta elección Delfina arrancó con la delantera, según sondeos que inflaron la percepción a su favor, según los tribunales electorales federal y local.
Es decir que cuatro casas encuestadoras facturaron sondeos sin metodología y cuentas fantasmas, siempre por encima de la aliancista Alejandra del Moral.
Durante el primer debate, hubo diversos análisis, pero fue clara la desenvoltura de Del Moral, con un mensaje y discurso bien ensayado.
Delfina Gómez también arrastra haber desaparecido las escuelas de tiempo completo durante su gestión al frente de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Además, la Auditoría Superior de la Federación le detectó irregularidades por más de 830 millones de pesos como titular de la SEP.
A todo ello, se le suman las divisiones al interior de su partido y los yerros cometidos en diferentes etapas de la campaña.
Con todos esos antecedentes y los negativos del gobierno de López Obrador, Delfina tiene más segura la derrota que la victoria.
Alejandra del Moral lo sabe de sobra. Va segura y a tambor batiente para alcanzar el triunfo el 4 de julio, con el respaldo del PRI, PAN, PRD y marginados del partido guinda.
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