Cdmx, abril 10 de 2023.
Pedro Moreno
* Juez les dicta prisión preventiva oficios
La Fiscalía General de la República acusó a cuatro elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, por su presunta responsabilidad en la muerte de cinco jóvenes, cuyos hechos se registraron el pasado 26 de febrero en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Este lunes 10 de abril, durante una audiencia que llevó a cabo de las 11:00 a las 14:21 horas, a los Militares identificados como Bernardo "N", Agustín "N", Jorge Nicolás "N" y Juan Carlos "N", un Juez les dictó prisión preventiva oficiosa en el Campo Militar 1 de la Ciudad de México.
Los imputados solicitaron la duplicidad del plazo constitucional, por lo que la audiencia se reanudará el próximo miércoles 12 de abril.
Cabe recordar que en la madrugada del 26 de febrero de 2023 los miembros de la Sedena se encontraba realizando labores de reconocimiento cuando escucharon detonaciones, por lo que se acercaron al lugar de donde venían. Posteriormente observaron un vehículo que iba a exceso de velocidad y que trató de evadirlos.
En la unidad tipo pick up, la cual no tenía placas y no tenía luces, iban siete jóvenes. Según el informe oficial de la Sedena dicho vehículo se estampó con otro estacionado por querer evadir a las autoridades.
En un comunicado de fecha 28 de febrero del presente año, el Ejército dio a conocer: "De esta situación, al escuchar un estruendo, el personal militar accionó sus armas de fuego; hecho que actualmente divwrsas autoridades se encuentran investigando para determinar la veracidad de los hechos".
El resultado fue la muerte de cinco jóvenes, otro herido y uno más ileso; además trascendió que en el Informe Policial Homologado redactado por los Militares se detalló que los soldados usaron sus armas sin que tuvieran autorización por parte de su Capitán.
Los disparos contra los civiles fueron realizados por al menos cuatro cabos de caballería, al revisar el vehículo que iba a exceso de velocidad y que se estrelló, los militares no encontraron nada ilícito.
La camioneta en la que viajaban las víctimas quedó con por lo menos 20 impactos de bala y dos personas habrían sido rematadas en la nuca cuando estaba en el pavimento, según lo informó el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo. Mientras que para el 28 de febrero la Comisión Nacional de Derechos Humanos informó sobre el inicio de una queja de oficio por lo ocurrido.
Uno de los jóvenes que sobrevivieron al ataque, Alejandro Pérez Benítez manifestó que los militares detonaron sus armas sin una razón aparente. Además, declaró que, junto con los otros seis jóvenes, acudió al centro nocturno Mister Pig y al salir tomaron la carretera a Ciudad Anáhuac. Detrás del asiento del piloto estaba Pérez Benítez quien se agachó para resguardarse de los disparos y cuando dejó de escucharlos levantó la cabeza y observó a sus acompañantes muertos.
Las víctimas fueron identificados como Gustavo Pérez Beriles, Wilberto Mata Estrada, Jonathan Aguilar Sánchez, Alejandro Trujillo Rocha y Gustavo Ángel Suárez Castillo, este último ciudadano norteamericano.
Asi mismo, la ONU se pronunció por estos lamentables acontecimientos; ocasión en la que indicó: "El empleo de las armas de fuego debe ser el último recurso, proporcional al objetivo legítimo que se persigue, con pleno respeto y protección de la vida humana. Toda muerte relacionada con el uso de la fuerza por efectivos militares debe ser investigada de forma independiente".
Por su parte y en relación con estos hechos, el Presidente Andrés Manuel López Obrador, durante su conferencia matutina del 01 de marzo, expresó que se realizarían investigaciones para "no ocultar nada" y aseguró que "si resultan responsables los miembros del ejército, que sean castigados".
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