Rebeca Marín
Febrero 1, 2020
Los mercados financieros serán más sensibles a las vulnerabilidades de la zona euro
1. Crisis de gobierno
La primera consecuencia de la votación del jueves al salir de la UE será una crisis de gobierno en Londres. David Cameron renunció como primer ministro y probablemente también lo hará como líder del partido conservador. Una nueva administración conservadora, claramente más anti UE en el tono, la reemplazará.
De no ser manejado cuidadosamente, este proceso puede dañar las relaciones entre Londres y otras capitales de la UE. Ésta última deberá interpretar el voto Brexit como un martillazo en la unidad de Europa.
En busca de la protección de esa unidad, el bloque estará dispuesto a ofrecer generosas ofertas pos Brexit para Gran Bretaña.
Las negociaciones estarán en peligro de convertirse en una pelea reñida, distrayendo a Europa de otros asuntos urgentes.
2. Los mercados financieros
En segundo lugar, el Brexit hará a los mercados financieros más sensibles a la vulnerabilidad de la zona del euro. La libra británica ya se ha hundido a un mínimo en 30 años.
Los inversores se preguntan si, a la luz de la conmoción por el Brexit, los gobiernos de la zona euro tienen la voluntad política y el apoyo público para fortalecer la arquitectura de la Unión Monetaria Europea. Una prueba será si la unión bancaria europea, que incluye un plan de seguro de depósitos común, progresa en los próximos 12 meses.
En la actualidad está bloqueada. Propuestas más ambiciosas, como un plan italiano para "bonos de migración" comunes de la UE para financiar la respuesta de la UE a la crisis de refugiados y migrantes, tendrán pocas posibilidades de convertirse en acción.
Países de la eurozona individuales estarán bajo el escrutinio del mercado intensificado.
Antes de la votación británica, los diferenciales de rendimiento se ampliaron entre los bonos alemanes y los de los países del sur de Europa, menos sólidos financieramente.
Las perspectivas para Portugal, que es gobernado por una coalición inestable de la izquierda moderada y radical, son inquietantes.
Los problemas profundamente arraigados de Grecia nunca han desaparecido. En España, que posee una elección general el domingo, las perspectivas de un gobierno estable y la reforma económica se ven empañadas por un sistema de partidos políticos fragmentados y el separatismo catalán.
3. Movimientos políticos anti sistema
En tercer lugar, los movimientos políticos anti sistema, especialmente los partidos de extrema derecha en Europa occidental, tomarán la inspiración del Brexit. Entre los más destacados está el Frente Nacional de Francia, cuyo líder, Marine Le Pen, tiene en la mira las elecciones presidenciales del próximo año.
Es poco probable que gane, pero puede llegar a ser un fuerte segundo. La extrema derecha no va a llegar al poder en cualquier país de la UE.
Pero va a ser capaz de atraer el apoyo suficiente para dar forma a un debate político de la izquierda, así como de la derecha, y por lo tanto influir en las acciones de los gobiernos. La política de inmigración será un ejemplo de ello.
4. Una integración más estrecha
En cuarto lugar, la UE estará bajo presión para desarrollar propuestas para una mayor integración.
Un plan como el del año pasado llamado "Informe Cinco Presidentes", no será suficiente. Si una unión económica y monetaria más cercana está fuera de su alcance, los franceses y los alemanes presentarán planes para una mayor cooperación en áreas como la defensa y la seguridad nacional.
5. Equilibrio interno
Por último, el Brexit perturbará el equilibrio interno de la UE. Con Gran Bretaña fuera, siete países del bloque del euro representarán sólo el 15% de la producción económica de la UE. En comparación con más del 30% con Gran Bretaña.
El Brexit aumentará la supremacía política y económica de Alemania en la UE, una perspectiva a la que ni Berlín ni sus socios le dan la bienvenida. El Brexit dañará la cohesión, la confianza y la reputación internacional de la UE. La consecuencia más grande de todas, por lo tanto, es que minará el orden político y económico liberal que Gran Bretaña, la Unión Europea y sus aliados mantiene.
¿Qué consecuencias tendría para la Unión Europea el "Brexit"?
El próximo 23 de junio, los británicos están llamados a las urnas para decidir si quieren continuar en la Unión Europea o salir mediante un referéndum, que, sin duda, marcará el futuro de Europa en los próximos años y que tendrá consecuencias para Reino Unido, pero también para la UE.
En este sentido, Foro Europa Ciudadana ha querido analizar qué posibles consecuencias tendría para el proyecto común europeo el Brexit.
Una posible salida de Reino Unido de la Unión Europea rompería el equilibrio de fuerzas existentes actualmente en la Unión, donde Gran Bretaña ejerce de contrapeso entre Francia y Alemania. Según el Presidente de Foro Europa Ciudadana, José Carlos Cano, "no se debe olvidar que Francia y Alemania recurrieron en los orígenes de la entonces Comunidad Económica Europea a la integración económica para fomentar lazos permanentes y que sirvieran para poder superar rivalidades históricas que habían desencadenado dos guerras mundiales.
En ese proyecto común, Reino Unido juega y ha jugado un papel muy importante al ofrecer una contrapartida al relevante paso de los estados continentales y por eso su salida rompería ese equilibrio de fuerzas ".
Perdida de la visión transatlántica de la UE. Reino Unido ofrece una visión transatlántica a Bruselas al integrar intereses derivados de la Commonwealth. En ese sentido, Reino Unido representa y transmite posiciones de países tan relevantes como Canadá, Australia, India o Nueva Zelanda que, con el Brexit, dejarían de tener peso y ser tenidas en cuenta.
Consecuencias económicas y comerciales. El Brexit traería consigo un debilitamiento del mercado único europeo y su peso relativo en la economía mundial provocando un descenso de la participación de la Unión Europea en el comercio internacional.
"Pero además provocaría- según José Carlos Cano- un desplazamiento de tráficos comerciales a favor del Reino Unido ya que muchos productos podrían beneficiarse de las más que probables ventajas arancelarias que un sustitutivo Tratado de Libre Comercio tendría entre el Reino Unido y la UE, utilizándolo como cabeza de puente para entrar en Europa".
Constituiría un mal precedente. El Brexit sentaría un mal precedente en Europa ya que podría reafirmar una corriente de opinión contraria a la UE ampliamente extendida en Europa y de la que no escapa España. En palabras del presidente de Foro Europa Ciudadana, "una salida de Reino Unido podría ser el primer paso para descomposición del proyecto común europeo que ha aportado paz, estabilidad y crecimiento. Por ello, es clave mantener unida la familia europea por nuestro bien y por de las generaciones futuras".
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