Rebeca Marín
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) pedirá a la Comisión Reguladora de Energía (CRE), el regulador del mercado eléctrico, suspender los permisos de generación que considere que podrían vulnerar o no den confiabilidad a la red de transmisión del Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
La compañía ha anunciado esta medida como parte de un listado de acciones encaminadas a evitar apagones como el del 28 de diciembre pasado, que fue causado, según ha identificado la empresa tras la revisión de un grupo de expertos, por un incendio y por los procesos de interconexión de una central eólica propiedad de la española Acciona.
La empresa eléctrica, dirigida por Manuel Bartlett, pedirá que sean suspendidos los permisos que no presenten ningún avance en su construcción o sean avances menores y aquellos que no cumplan con dar confiabilidad al sistema, sin dar más detalles sobre cómo se definirá esto último.
La CFE no dio a conocer qué centrales podría tener su permiso suspendido en fechas próximas, pero en reiteradas ocasiones los voceros de la compañía han acusado a las plantas eólicas y solares de quitar confiabilidad a la red, debido a que generan electricidad de manera intermitente.
En conferencia de prensa, como en ocasiones anteriores, los directivos de la compañía han acusado que la anterior administración federal entregó permisos de generación en exceso y sin planeación previa. "No va ser de manera indiscriminada, sino que vamos a ver cuales son aquellas centrales que sí permiten incrementar o darle garantía al SEN en el suministro de energía.
Esas centrales que están ubicadas en puntos estratégicos, que sí las requiere el sistema, vamos a proponer que sigan adelante', dijo Víctor Nolasco, director de Planeación Estratégica de la estatal.
'Sobre aquellos, como se dijo, que tengan un impacto negativo en la confiabilidad y en la seguridad de nuestro SEN y que tenga cero avance constructivo, nos vamos a reunir con la CRE para proponer la suspensión de estos proyectos".
Los permisos, dijo Nolasco, podrían ser suspendidos hasta que los "estudios técnicos y de factibilidad técnica permitan su incorporación sin riesgo al SEN". La CFE también pedirá realizar una verificación de los requerimientos con los que deben cumplir las centrales eléctricas para llevar a cabo sus pruebas de interconexión, necesarias para comenzar su operación.
Y solicitará a la CRE diferir las solicitudes de permisos que pretendan instalar una planta en zonas que consideren no tengan capacidad de transmisión.
Algunas de las acciones que pretende llevar a cabo la CFE estaban contenidas en la política de confiabilidad publicada por la Secretaría de Energía (Sener) en mayo del año pasado, que quedó sin efecto tras el fallo de jueces especializados en competencia y de la Suprema Corte de Justicia, como la incidencia de la estatal en el programa de instalación de nuevas centrales o la emisión de autorizaciones en lugares que consideren no estén congestionados.
Desde el inicio del sexenio, el regulador del mercado, que obtuvo cierta independencia con la reforma de 2013, ha pausado la entrega de nuevos permisos de generación eléctrica, lo que se alinea con la política gubernamental de fortalecer a la compañía eléctrica nacional.
La CFE, que también con la reforma se convirtió en un participante más del mercado de generación eléctrica, ha negado que esta petición al regulador esté por encima de sus facultades. "Es nuestra obligación, como está establecido en la Ley de la Comisión Federal de Electricidad.
Es nuestra obligación garantizar la seguridad de las redes, porque en ello va la seguridad de todos los mexicanos. Es una función que tiene el director y la vamos a hacer cumplir", ha dicho Bartlett en la conferencia de prensa.
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